Reflexión sobre el evangelio
«Los escribas y fariseos comenzaron a acosarlo…»: San Lucas recordará frecuentemente esta actitud de los enemigos de Jesús. El pueblo seguía a Jesús y se entusiasmaba con su predicación y sus obras, mientras que los fariseos y escribas no aceptaron al Señor, y no toleraban que la muchedumbre se adhiriera a Él: intentaban por todos los medios desacreditarle ante el pueblo (cfr. Jn 11,48).