Reflexión sobre el Evangelio
«Mi casa será casa de oración»: Con este texto de Isaías (56,7) Jesús subraya la finalidad del Templo. El gesto del Señor enseña el respeto que merecía el Templo de Jerusalén. Cuánta mayor veneración merecen nuestros templos, donde Jesús mismo está realmente presente en la Sagrada Eucaristía.