Reflexión sobre el Evangelio
«El niño saltó de gozo en mi seno»: San Juan Bautista, aunque fue concebido en pecado –el pecado original– como los demás hombres, sin embargo, nació sin él porque fue santificado en las entrañas de su madre santa Isabel ante la presencia de Jesucristo (entonces en el seno de María) y de la Santísima Virgen. Al recibir este beneficio divino san Juan manifiesta su alegría saltando de gozo en el seno materno. Estos hechos fueron el cumplimiento de la profecía del arcángel san Gabriel.