Reflexión sobre el evangelio
«Gracia sobre gracia»: Puede entenderse, con san Juan Crisóstomo y otros Santos Padres, como la substitución de la economía salvífica del Antiguo Testamento por la nueva economía de la gracia traída por Cristo. También puede indicar una superabundancia de dones otorgados por Jesús: a unas gracias se añaden otras, y todas brotan de la fuente inagotable que es Cristo, cuya plenitud de gracia no se acaba nunca. «Él no tiene el don recibido por participación, sino que es la misma fuente, la misma raíz de todos los bienes: la Vida misma, la Luz misma, la Verdad misma. Y no retiene en sí mismo las riquezas de sus bienes, sino que los entrega a todos los demás; y habiéndolos dispensado, permanece lleno; no disminuye en nada por haberlos distribuido a otros, sino que llenado y haciendo participar a todos de estos bienes permanece en la misma perfección» (Hom. Sobre S. Juan, 14,1).