Memoria de san Bernardo, Abad y Doctor de la Iglesia
Antífona de Entrada
El Señor colmó a san Bernardo con espíritu de inteligencia, para que transmitiera al pueblo de Dios las riquezas de la doctrina.
Oración Colecta
Dios nuestro, que hiciste que san Bernardo se desviviera por la unidad y la paz de tu Iglesia y la iluminara con sus enseñanzas llenas de amor, haznos partícipes del fervor de su espíritu para poder vivir como verdaderos hijos tuyos.
Por nuestro Señor Jesucristo…
Amén.
Primera Lectura
La gloria del Señor penetró en el templo
Lectura del libro del profeta Ezequiel 43, 1-7a
En aquellos días, un ángel me llevó a la puerta del templo, que da hacia el oriente, y vi que la gloria del Señor venía del oriente. Se oía un ruido como el estruendo de un río caudaloso y la tierra resplandecía con el fulgor de la gloria de Dios. Esta visión me recordó la que tuve cuando el Señor vino a destruir la ciudad y la que había tenido junta al río Kebar. Y caí rostro en tierra.
La gloria del Señor penetró en el templo por la puerta que da al oriente. El espíritu me levantó y me llevó al atrio interior y vi que la gloria del Señor llenaba el templo. Entonces oí que alguien me hablaba desde el templo, y el hombre que estaba junto a mí me dijo: «Hijo de hombre, éste es el lugar de mi trono, el lugar donde pongo las plantas de mis pies. Aquí habitaré para siempre con los hijos de Israel».
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
Salmo Responsorial
Del salmo 84
El Señor habitará en la tierra.
Escucharé las palabras del Señor, palabras de paz para su pueblo santo. Está ya cerca nuestra salvación y la gloria del Señor habitará en la tierra.
El Señor habitará en la tierra.
La misericordia y la verdad se encontraron, la justicia y la paz se besaron, la fidelidad brotó en la tierra y la justicia vino del cielo.
El Señor habitará en la tierra.
Cuando el Señor nos muestre su bondad, nuestra tierra producirá su fruto. La justicia le abrirá camino al Señor e irá siguiendo sus pisadas.
El Señor habitará en la tierra.
Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Su Maestro es uno solo, Cristo, y su Padre es uno solo, el del cielo, dice el Señor.
Aleluya.
Evangelio
Los fariseos dicen una cosa y hacen otra
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 23, 1-12
En aquel tiempo Jesús dijo a las multitudes y a sus discípulos: «En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y fariseos. Hagan pues, todo lo que les digan, pero no imiten sus obras, porque dicen una cosa y hacen otra. Hacen fardos muy pasados y difíciles de llevar y los echan sobre las espaldas de los demás, pero ellos ni con el dedo los quieren mover. Todo lo hacen para que los vea la gente. Ensanchan las filacterias y las franjas del manto; les agrada ocupar los primeros lugares en los banquetes y los asientos de honor en las sinagogas; les gusta que los saluden en plazas y que la gente los llame maestros.
Ustedes, en cambio, no dejen que los llamen maestros; porque no tienen más que un Maestro y todos ustedes son hermanos. A ningún hombre sobre la tierra lo llamen padre porque le Padre de ustedes es sólo el Padre celestial. No se dejen llamar guías porque el guía de ustedes es solamente Cristo. Que mayor de entre ustedes sea su servidor. Porque el que se enaltece será humillado y el que se humilla será enaltecido».
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Oración sobre las Ofrendas
Que el sacrificio que vamos a ofrecerte en la festividad de san Bernardo sea, Señor, para tu Iglesia una fuente de unidad y de paz.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.
Antífona de la Comunión
Así como el Padre me ha amado a mí, así yo los he amado a ustedes, dice el Señor; permanezcan, pues, en mi amor.
Oración después de la Comunión
Que esta comunión que hemos recibido nos renueve, Señor, en el cuerpo y en el espíritu y, por intercesión de san Bernardo, nos encienda en el amor a Cristo, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Amén.