27ª Semana del Tiempo Ordinario
Antífona de Entrada
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar? Cuando me asaltan mis enemigos, tropiezan y caen.
Oración Colecta
Señor Dios, de quien todo bien procede, escucha nuestras súplicas y concédenos que comprendiendo, por inspiración tuya, lo que es recto, eso mismo, bajo tu guía, lo hagamos realidad.
Por nuestro Señor Jesucristo…
Amén.
Primera Lectura
¿Han recibido el Espíritu Santo por haber hecho lo que manda la ley de Moisés, o por haber creído en el Evangelio?
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Gálatas 3, 1-5
¡Insensatos gálatas! ¿Quién los ha ofuscado para que no le hagan caso a la verdad, siendo así que les hemos presentado vivamente a Jesucristo clavado en la cruz? Solo quiero preguntarles una cosa: ¿Han recibido el Espíritu Santo por haber hecho lo que manda la ley de Moisés, o por haber creído en el Evangelio? ¿Tan insensatos son? ¿Habiendo comenzado movidos por el Espíritu, quieren terminar haciendo obras meramente humanas? ¿Han recibido en vano tantos favores? Espero que no. Vamos a ver: cuando Dios les comunica el Espíritu Santo y obra prodigios en ustedes, ¿por qué lo hace? ¿Porque han cumplido lo que manda la ley de Moisés, o por haber creído en el Evangelio?
Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.
Salmo Responsorial
Lucas 1
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.
El Señor ha hecho surgir en favor nuestro un poderoso salvador en la casa de David su siervo. Así lo había anunciado desde antiguo, por boca de sus santos profetas.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.
Anunció que nos salvaría de nuestros enemigos y de las manos de todos los que nos aborrecen, para mostrar su misericordia a nuestros padres, y acordarse de su santa alianza.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.
El Señor juró a nuestro padre Abraham concedernos que, libres ya de nuestros enemigos, le sirvamos sin temor, en santidad y justicia delante de él, todos los días de nuestra vida.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel.
Aclamación antes del Evangelio
Aleluya, aleluya.
Abre, Señor, nuestros corazones, para que comprendamos las palabras de tu Hijo.
Aleluya.
Evangelio
Pidan y se les dará
Lectura del santo Evangelio según san Lucas 11, 5-13
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Supongan que alguno de ustedes tiene un amigo que viene a medianoche a decirle: “Préstame, por favor, tres panes, pues un amigo ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle”, y, desde dentro, el otro le responde: “No me molestes, no puedo levantarme a dártelos; la puerta está cerrada; mis hijos y yo estamos acostados”.
Si el otro sigue tocando, yo les aseguro que, aunque no se levante a dárselos por ser amigo, al menos por su molesta insistencia se levantará y le dará cuanto necesite. Así también les digo a ustedes: Pidan y se les dará, busquen y encontrarán, toquen y se les abrirá; porque quien pide, recibe; quien busca, encuentra, y al que toca, se le abre. ¿Habrá entre ustedes algún padre que, cuando su hijo le pide pan, le dé una piedra? ¿O cuando le pide pescado, le dé una víbora? ¿O si le pide un huevo, le dé un alacrán?
Si ustedes, pues, que son malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, ¿cuánto más su Padre celestial dará el Espíritu Santo a quienes se lo piden?»
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.
Oración sobre las Ofrendas
Mira, Señor, con bondad nuestro servicio para que esta ofrenda se convierta para ti en don aceptable y para nosotros, en aumento de nuestra caridad.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.
Antífona de la Comunión
Señor, tú eres mi fortaleza, mi refugio, mi liberación y mi ayuda. Tú eres mi Dios.
Oración después de la Comunión
Señor, que la virtud medicinal de este sacramento nos cure por tu bondad de nuestras maldades y nos haga avanzar por el camino recto.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.